Uno de los autos más guapos(*) que conocimos cumple 80!
Por: Bocha Balboni

Después de producir durante 19  años y totalizar más de 15 millones de Ford T con altísimo éxito, de haber revolucionado la historia y los negocios en el mundo, para el fundador de la dinastía Ford era medio difícil pensar el reemplazo. Pero el 26 de mayo de 1927, salió el último Ford T de la línea de fabricación.
        
Qué se podía hacer mejor que el “T”?  Por ahí, el desafío era inmenso. Casi cualquier cosa que hiciera no iba a tener ese éxito, y en esas cavilaciones se fue algo más de tiempo deseado. La competencia mejoraba, el público iba cambiando  ya había aceptado el auto como medio de transporte, ahora quería mas comodidades, pero don Henry montado en su éxito arrollador, había seguido porfiando apenas actualizando el T, pero las ventas empezaban a resentirse. No  había pasado totalmente la era del T, pero Ford se estaba quedando atrás.
          
A la sombra del estancamiento de la empresa de Dearborn crecía la competencia, Chevrolet, Dodge, Overland (llegó a ser segundo fabricante de USA)  se iban quedando con parte del mercado de Ford, no por que fueran estos malos sino porque iban ofreciendo mejores alternativas.
        
Frenos en las cuatro ruedas, caja de cambios, líneas más modernas, mejor estabilidad, mas comodidad. La revolución industrial había traído sus frutos y había quienes ya podían acceder a mejores autos.
         
Había autos más caros y muchos más caros también, Packard, Graham-Paige, Willys-Knight, Pierce, Auburn, Buick,  Los había desde unos pesos mas a diez y veinte veces mas caros que el simpático, ubicuo, utilitario y querido T.
        
La franja de mercado que ocupaba Ford esperaba mas de la marca. Don Henry estaba embarcado en su proyecto espectacular: poner en la calle un V-8 al alcance de todo el mundo, otra revolución casi como el T. Motor V-8 solo montaban las grandes marcas, la salida se demoraba mientras los concesionarios Ford perdían ventas.
         
Ven, lo que siempre les digo? No compren los profilácticos pinchados que venden los charlatanes. Hasta al mejor cazador se le escapa la liebre. Los fracasos en los negocios están más relacionados con los errores humanos-técnicos que con la mano negra de los mercados, esa que los vendedores de idioteces usan para que muerdan el anzuelo los giles.
          
Vamos con Ford! Para eso estamos acá ocupando espacio. Es cierto, venía pensado en contarles lo del Ford A, que fue el modelo que siguió al T, y que en estos dias va a cumplir 80 pirulos!!!!!!!
           
Mi viejo me contaba: “mi papá después de el primer Ford (al que habían agregado luces a carburo porque de fábrica no traía luces) se compró un Overland!”. Y yo siempre pensaba, que habría sido un Overland, tal vez  como tener una Renoleta y pasar a un Megane! Cuando vi la foto me quise morir era negro y cuadrado igual que T. Entonces? Ah… pero tenía frenos en las 4, ruedas, caja de cambios,  iluminación y arranque  eléctricos. Valía como tres Forcitos…
           
Entonces a Ford lo apuraban  y como el V-8 no salía, y apareció el A, que era la segunda vez que Ford llamaba como la primera letra del abecedario a un modelo suyo, ya que en los comienzos (1903), antes del T había habido  otro A.

Este nuevo fue una  cosa a medio camino entre lo que querían a hacer y el T. Mientras se acercaba un poco a la competencia,  se alejaba un tanto del T, pero no lo suficiente.
           
Ya otros se le habían adelantado y había autos de seis cilindros a precio popular, pero el A aunque tenia frenos en las cuatro ruedas, mucha mas comodidad y mejor andar que el antecesor, venia con un motorcito de cuatro cilindros. De 200,5 Pulgadas Cub., o 3.285 cc.,  era la necesaria solución de compromiso para llenar el espacio que dejaba el haberse quedado estancados en el éxito del auto mas revolucionario de la historia.
             
Se habían dormido sobre los laureles. El Ford A. fue un muy buen auto, muy buscado y muy apreciado por los usuarios de todo el mundo,  tuvo muy buena acogida también basado en la herencia de honestidad, robustez, rendimiento que había marcado Ford.
              
Siguiendo la tradición de la marca era un auto muy económico y robusto. Construido totalmente en chapa de acero con muy pocas partes de madera, soportó muy bien el rudo trabajo a que fue sometido. Y es la principal razón por la cual hoy todavía hay tantos. Son indestructibles!
        
             
El A no tiene filtro de aire, como muchos autos de esa época, y en muchas cosas es muy parecido a otros competidores, pero el sonido resultante es absolutamente distinto, Es inconfundible, no es necesario verlo para saber que pasa un Ford A. Su caja de velocidades también es ruidosa, pero por sobre todo el sonido del motor y el muy notable de la aspiración son personalísimos.
               
Aún con el apuro que nunca reconoció,  le alcanzó a don Henry para algunos toques revolucionarios, como por ejemplo el primer vidrio inastillable en la historia del automóvil. Hasta ahí los vidrios eran como los de ventanas y en muchos accidentes causaban heridas mas graves que la propia colisión en si. También fue el primer auto con carrocería totalmente soldada, así como ofrecer  radio como opcional.

Con el tanque de nafta situado en el torpedo por encima del nivel del carburador no necesitaba bomba ya que el combustible  bajaba por gravedad como en las motos, a diferencia de otros de la época que montaban el mecanismo Stewart, origen de no pocos problemas.
                
A la época de su presentación fueron siete los tipos de carrocería que se ofrecieron: Roadster, Faetón (abiertos)  Camión,  Comercial, Sport Cupé,  Cupé y dos puertas. El modelo Roadster a u$s 395, el Faetón a 495; la Cupé a 550; el Dos Puertas a 495, dólares puestos en Detroit. La diferencia entre la cupé y sport cupé es que este último la capota se puede plegar. Todos se ofrecían en cuatro colores En los años siguientes se incorporaron mas modelos, y versiones Stándard y De Luxe. Se conocieron modelos de los años 28. 29,30 y 31.

Traían de fábrica una dotación de herramientas en un estuche de cuero, tipo sobre,  abrochable: llave ajustable, 2 llaves de boca, alicate, destornillador, llave saca bujías combinada con una hexagonal, mas dos palancas para desmontar cubiertas, gato, inflador, bomba de engrase, y un completo manual del dueño.
              
La misma vuelta a la plaza tradicional de esta mi  ciudad-pueblo de hoy, se hacía en aquellos tiempos y era muy simpático verlos girar regulando a muy bajas revoluciones cuando nadie tenía apuro y los autos se “bigoteaban” …. Que??? Se ligoteaban. Porque sobre la columna de la dirección como ahora la palanquita de las luces de giro, pero mas cortitas había dos, una era el acelerador de mano y la otra el avance del encendido, de cómo se posicionaban esas palancas que nuestro lunfardo mecánico bautizó bigotes, dependía que se consiguiera una marcha suave, lenta y regular, sin tocarles el acelerador de pie.
               
Ya se, suspiraste  dijiste: La pucha!, que viejo este tipo! Pero aunque soy viejo, te equivocás, bah… yo te hago equivocar. Porque yo nacía cuando los aliados invadían el sur de Italia, y los A ya eran cosa antigua. Pero como acá no había autos nuevos  esos Forcitos con treinta años encima seguían dándole satisfacciones a sus dueños, cuando este servidor era muchacho y ya había contraído el terrible SMG (SÍNDROME MANGIA GRASA)
               
Confiables, gauchos, andaban por el campo y la ciudad. Eran TAXIS, Pickups, camioncitos, ambulancias, llevaban novias, médicos. No los paraba el agua, el barro, ni la arena, o  sencillamente la falta de caminos. Si querías llegar, tenías de ir un Ford A!
             
El 20 de octubre de 1927 el propio Henry Ford estampa en el primer block en número uno, y el 2 de diciembre de ese mismo año se inicia la entrega, las ventas  habían comenzado con anterioridad ya que los mas entusiastas habían reservado sus unidades sin saber de que se trataría. Ford había invertido nada menos de 100 millones de dólares de aquellos dias.
            
Hasta el 7 de diciembre 1931, se producirían 4.320.446 unidades, en varias versiones, evoluciones y distintos modelos, cuando pese al éxito se notaba que el público esperaba mas, y las ventas aflojaban.
             
Bruscamente interrumpida la producción salió el “B” que vino al principio en  cuatro cilindros y mas tarde con el esperado V-8, modelo que los norteamericanos consideran el mas lindo de todos los Ford, y por ahí coincido. Un modelo muy lindo pero poco visto entre nosotros.
             
Pero, la historia del “Forocho” es para otra vez.
            
Quiero destacar que en estos dias mis conciudadanos esperancinos Eugenio Caussi, Rodolfo Oggero y José Kestler están uniendo LA QUIACA con USUAHIA, en dos Ford A, justamente en homenaje a los 80 años de este auto, demostrando que aún tantos años después con un Ford A se va a cualquier parte!

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(*) Como se que nos leen mucho también en España por los correos que recibo, aclaro que uso esta palabra en la acepción que le damos en Argentina como RUDO, VALIENTE, CORAJUDO, TRABAJADOR.